La mayoría de la población no compartió la visión presidencial de que lo que su hermano recibió fueron aportaciones a su movimiento y sobre la equidad de trato que les da a su hermano y a los panistas.
La popularidad del presidente Andrés Manuel López Obrador se diluye cada vez más con el paso del tiempo, a septiembre la aprobación a su gestión mantuvo una tendencia decreciente por cuarto trimestre consecutivo al caer 21 puntos desde junio de 2019, cuando obtuvo su nivel más elevado (66 por ciento). Además, por segunda vez en lo que va de su administración son más los mexicanos que lo reprueban que quienes lo aprueban.
De acuerdo con los resultados del más reciente estudio México: Política, Sociedad y Cambio. Escenarios Políticos elaborado por GEA Grupo de Economistas y Asociados e ISA Investigaciones Sociales Aplicadas los principales motivos en la caída de la popularidad presidencial son el grave deterioro de la economía del país y de las familias, así como el inadecuado manejo de la pandemia. Asimismo, no escapa la intención del mandatario de utilizar el caso de Lozoya para ganar las elecciones del próximo año y no tanto para castigar a los corruptos.
Uno de los reveses más fuertes que muestra el análisis es en torno a que más de la mitad de los ciudadanos piensa que el país va por el rumbo equivocado, pues mientras que en marzo del año pasado 60 por ciento de los encuestados consideraban que el rumbo por el que el gobierno llevaba al país era el correcto y 25 por ciento afirmaban que era equivocado, esta opinión dio un vuelco en la última medición ya que sólo 29 por ciento calificaron como correcto el rumbo y 54 por ciento dijeron que es equivocado.
Desde su campaña, López Obrador sembró grandes expectativas en la ciudadanía de que habría una sustancial recuperación de su poder adquisitivo, lo que hoy en día la población considera que no ha sido así. Esta pérdida de la expectativa de una mejora en los ingresos familiares ha impactado negativamente a la popularidad del presidente, sin embargo, es de destacar que quienes reciben apoyos sociales del gobierno están contentos y por ello tienden a aprobarlo.
La posición del ciudadano en la actividad económica también es una variable que incide notablemente. Quienes trabajan o están desempleados desaprueban mayoritariamente al presidente, mientras quienes no participan en la actividad económica (estudiantes, amas de casa y personas mayores, que reciben apoyos del gobierno) aprueban mayoritariamente, destaca el sondeo.
El COVID-19 ha sido un irruptor que ha dejado honda huella en la calificación del gobierno federal pues la mayoría de la población descalifica el trato que al respecto ha tenido la administración. Casi la mitad de los mexicanos piensa que la pandemia en México está fuera de control y que el sistema de salud no ha contado con los equipos y materiales suficientes para enfrentarla.
En el sondeo tanto López Obrador como el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell reprobaron en el manejo de los asuntos relacionados con la pandemia.
En junio, 46 por ciento de los encuestados percibían como positiva la forma en cómo el presidente manejaba los asuntos relacionados con la pandemia, a dos meses de distancia esta calificación cayó seis puntos y en septiembre se coloca en 40 por ciento.
En contraste la desaprobación va creciendo, pues en el noveno mes del año se colocó en 60 por ciento, seis por ciento más con respecto a junio.
Por otra parte, es de destacar que los efectos negativos de la pandemia y de la crisis económica han derrumbado la evaluación sobre la eficacia de los logros del gobierno. Sólo alrededor de 10 por ciento de los ciudadanos afirman que el gobierno está teniendo mucho éxito en solucionar los principales problemas del país.
De esta manera, el éxito del gobierno en el combate a la pobreza era de 25 por ciento contra nueve por ciento actual; en el mejoramiento a los salarios era de 26 por ciento y hoy sólo alcanza 10 por ciento; la visión positiva sobre la reducción del desempleo hace un año presentaba 24 por ciento, porcentaje que ahora es sólo de ocho por ciento; el impulso al crecimiento económico de hace un año alcanzaba 24 por ciento y ahora es de únicamente nueve por ciento, y finalmente, la disminución de la inflación era de 20 por ciento, lo que cayó a siete por ciento.
Pan con cordonazo
En su presunto combate a la corrupción López Obrador posicionó mediáticamente la extradición de Emilio Lozoya y su enjuiciamiento, lo que la mayor parte de la gente piensa que es para ganar elecciones y no tanto para castigar a los corruptos.
De acuerdo con los resultados del sondeo la mayoría de la población no compartió la visión presidencial de que lo que su hermano recibió fueron aportaciones a su movimiento y sobre la equidad de trato que les da a su hermano y a los panistas.
Por otra parte, la encuesta de GEA-ISA incluyó cuestionar a la ciudadanía sobre la percepción que tienen sobre el partido del presidente. A este respecto, el estudio destacó que la imagen negativa de Morena ha crecido continuamente desde septiembre de 2019 y ahora ya tiene más opiniones negativas que positivas.
A pesar de la disminución de las simpatías por Morena entre la población, esto no ha sido canalizado por sus opositores y ni el PRI ni el PAN han mejorado a este respecto en lo que va del año.
Con respecto a las preferencias electorales dos son los datos relevantes: la caída de Morena que tendría poco más de la quinta parte y la recuperación del PRI, que superó al PAN.
La encuesta elaborada por GEA-ISA se realizó del 5 al 7 de septiembre de 2020 con una muestra representativa del universo de electores registrados en el padrón electoral de mil ciudadanos entrevistados en sus domicilios. El margen de error del sondeo es de 3.1 por ciento.