Los delegados y servidores de la nación fueron parte de la estructura electoral de López Obrador y Morena, mientras hoy muchos de ellos buscan alguno de los miles de cargos que están en juego en las elecciones de 2021.
Diputados del PRD y el PAN condenaron el manejo que el gobierno federal ha realizado en torno a la adquisición, distribución y aplicación de las vacunas anti-COVID-19, y exigieron al presidente López Obrador y a Morena no utilizar los recursos públicos ni la vacuna como una estrategia de campaña.
La coordinadora de los legisladores perredistas en la Cámara de Diputados, Verónica Juárez Piña, calificó como sumamente grave e irresponsable que el gobierno federal pretenda vacunar primero a los servidores de la nación antes que a los grupos vulnerables y a la población en general, y aseguró que esta acción ratifica “el uso político y electoral que el gobierno federal y Morena le están dando a la campaña de vacunación”.
“La incapacidad del gobierno federal y la decisión del presidente de la República de centralizar la aplicación de las vacunas ha generado abusos y anarquía y permitido que funcionarios públicos que no están en la primera línea de combate al COVID-19 se salten el orden y se vacunen e incluso vacunen a sus familiares”.
Por separado, el coordinador de los diputados federales del PAN, Juan Carlos Romero Hicks, afirmó que la estrategia del gobierno federal para aplicar la vacuna contra la pandemia de COVID-19 “es un verdadero desastre”, por lo que los legisladores blanquiazules presentaron un recurso legislativo ante el Congreso de la Unión para exhortar al Consejo de Salubridad General y al presidente de la República, como responsable de las autoridades de salud pública, para instrumentar un padrón único y transparente de aplicaciones de la vacuna anti-COVID-19.
Romero Hicks criticó la opacidad en los contratos de adquisición de vacunas, “por ese ocultamiento, desafortunadamente hoy día no hay manera de conocer con certeza cuándo y cuántas dosis llegarán”.
Asimismo, consideró que el Sistema Nacional de Vacunación ha incurrido en tres fallas fundamentales: compra tardía; cero adquisición de ultracongeladores y utilizar la estrategia “correcaminos” sin el sistema nacional de salud. Junto a esto, es previsible que los cinco millones de dosis de CanSino, destinados a mayores de 60 años, no vayan a llegar a tiempo toda vez que ni siquiera se han adquirido todavía.
El legislador panista añadió que entre lo más preocupante también destaca la estrategia gubernamental para la distribución de las vacunas toda vez que se basa en brigadas compuestas por los aparatos clientelares que ha diseñado la llamada cuarta transformación como servidores de la nación, promotores de bienestar, sembrando vida, “la escuela es nuestra”, becas Benito Juárez, lo que ha abierto la puerta al manejo electorero e incluso a la corrupción y la vacunación de funcionarios antes que a las poblaciones más necesitadas.
En este aspecto coincidió con lo expresado por la coordinadora del PRD y además subrayó que “no hay que olvidar que los ‘superdelegados’ y los servidores de la nación se convirtieron en las estructurales electorales de Andrés Manuel y Morena en los comicios de 2019 y 2020 y que muchas de ellas y ellos son ahora candidatos a los gobiernos de los estados o en alguno de los miles de cargos que están en juego en las elecciones de 2021”.
Juárez Piña dijo que “si al presidente y a las autoridades sanitarias les incomoda que se les acuse de utilizar con fines políticos y electorales las vacunas, es muy simple, que se apeguen a las normas ya establecidas y que permitan que sea el Consejo Nacional de Vacunación (Conava) se haga cargo de la campaña de vacunación contra el COVID-19”.