Sin sobresaltos, sin sorpresas y sólo cumpliendo con un acto protocolario en la que asistieron 448 de los 600 que conforman el Consejo Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y quienes, a través de su voto depositado en una mega urna transparente, eligieron por una amplia mayoría de 400 votos a Alejandro Moreno Cárdenas y a Carolina Viggiano Austria a la presidencia y secretaría general del tricolor, respectivamente, hasta 2028.
En su discurso de toma de posesión, Moreno Cárdenas se ufanó de su triunfo y dijo que este se llevó a cabo de manera “ejemplar, transparente, democrática, libre y de manera secreta”. Asimismo, anunció que emprenderá una reforma en el partido para lo que se instalarán seis comisiones, entre ellas las de análisis cualitativo y cuantitativo, diagnóstico electoral, comunicación y de diálogo con la militancia, además de que se analizará y definirá la relación del PRI con la sociedad y los demás actores políticos.
Resaltó que como oposición el Revolucionario Institucional tendrá un papel “firme y crítico y escrutará cada paso del nuevo gobierno“.
Añadió que “el PRI será un feroz opositor. Seremos críticos y escrutaremos cada paso del nuevo gobierno para señalar cuando sus acciones eludan al interés de los mexicanos, defenderemos las instituciones, la República y la democracia. ¡No hay que tenerle miedo al gobierno!”.
Mata a hierro
El PRI siempre se había distinguido porque sus militantes expresaban al interior sus diferencias e inconformidades, y después de negociaciones que no trascendían a lo público todos se alineaban sin ocasionar ningún revuelo. Esto terminó en la era de Moreno Cárdenas, quien logró que varios expresidentes del tricolor como Dulce María Sauri Riancho, Enrique Ochoa Reza y Pedro Joaquín Codwell no sólo hicieran públicos sus desacuerdos con ‘Alito’, sino que inclusive en respuesta a los cambios de estatutos en la que se permitía su reelección, entre otros cambios que consideraron lejanos a sus orígenes, provocaron que se presentaran alegatos ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
A Alejandro Moreno no le llevó mucho buscar la manera de ponerles un alto y pasó más allá de las amenazas de expulsarlos a tomar una acción dura y contundente, pues junto con los senadores electos que están alineados a su dirigencia, expulsaron de su grupo parlamentario del tricolor que conformará la próxima legislatura a Manlio Fabio Beltrones Rivera.
A través de un comunicado, el PRI justificó la decisión al señalar que “esta determinación se basa en la gravedad de las acciones del senador Beltrones Rivera, las cuales han atentado de manera significativa contra la unidad ideológica, programática y organizativa del Partido.
“El senador Beltrones queda en libertad de unirse a cualquier otro grupo parlamentario, y en ningún caso sus dichos, declaraciones, votos o posicionamientos representan a la bancada del PRI ni al partido”, aclaró.
Manlio Fabio Beltrones Rivera fue gobernador del estado de Sonora, también se desempeñó como diputado federal y senador, llegando a ser presidente de cada una de las Cámaras y una figura muy influyente dentro del PRI. En los últimos días se convirtió en uno de los más férreos críticos de Alejandro, Moreno por lo cual actualmente enfrenta diversos procedimientos sancionadores de expulsión, conforme a los estatutos y normativas internas del PRI.