“El que de ustedes quiera ser grande, que se haga el servidor de ustedes.” (Mt. 20,26)
Estar al servicio de todos es la actitud de aquellos que aspiran ser grandes ante Dios y no ante los hombres.
La humildad y el servicio están siendo de gran ayuda en este periodo de crisis que atraviesa la humanidad. Hemos visto a los grandes de la tierra inclinarse para implorar la misericordia de Dios.
Estamos descubriendo que la solidaridad es el arma más poderosa contra la pandemia.
Todos los días tenemos muchas oportunidades para, de alguna manera, ofrecer ayuda a alguien, para estar al servicio de quien más necesita en este momento.
Podemos aprender mucho con todo esto: que el amor mutuo es nuestra mayor riqueza y que el servicio es el bien más valioso que podemos ofrecer.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento
apoloniocnn@gmail.com