Designada por el presidente López Obrador como representante de la Policía Federal en la Guardia Nacional
La oficial cuenta con 12 doctorados, tres académicos y nueve Honoris Causa, además de 34 diplomados, así como una maestría en Medicina Forense con mención honorífica.
Ignacio Carvajal/Veracruz
Eran inicios del 2009. Fidel Herrera era el gobernador de Veracruz y Los Zetas cogobernaban. Las calles manchadas de sangre, cruces, cadáveres y balaceras en cada esquina. Pocas eran las cosas de la vida cotidiana que no controlaran o aspiraran a hacerlo, como la antesala a la tumba.
Por marzo de ese año, hubo un enfrentamiento en el puerto de Veracruz. Las huestes de Los Zetas y los Matazetas, enviados por el Chapo Guzmán en su intento por apoderarse de territorios en El Golfo, se dieron con todo. Eran unos ocho muertos de lado de los Zetas, entre ellos, operadores de relevancia. Había sido una masacre.
EL PEOR DÍA DE SU VIDA
Camino a la morgue, ubicada en el Instituto de Ciencias Forenses de la Universidad Veracruzana, donde la encargada era Patricia Trujillo Mariel, nueva integrante de la Coordinación Operativa Institucional de la Guardia Nacional, el personal de Periciales fue alertado sobre un comando que intentaba robarse los cadáveres que trasladaban.
Los cuerpos llegaron al forense ubicado en la avenida Juan Pablo II, donde jugaba papel relevante Trujillo Mariel, la destacada académica con 12 doctorados y 22 libros que se suma a las labores contra la delincuencia organizada, en auxilio al gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Ese día, quizás, uno de los peores en la vida de la doctora Trujillo Mariel, quien en ese entonces era reconocida por sus aportes a la ciencia forense, las conferencias y foros forenses que anualmente realizaba en las instalaciones de la USBI de Mocambo.
El comando de los Zetas llegó esa noche hasta el forense y lanzó el reclamo a los encargados.
-Nos dan los cuerpos que acaba de traer Periciales o armamos un desmadre.
-No se puede -contestaron los responsables.
-Si el problema es reemplazar los cadáveres, ahorita les traemos otros -amenazaron los pistoleros mientras tenían rodeado el inmueble.
Los responsables del sitio se atrincheraron y llamaron a sus superiores. Trujillo Mariel tuvo que haber estado enterada del sainete.
A los pocos minutos, un fuerte comando del Ejército Mexicano salió de la base en La Boticara al Semefo, los maleantes se marcharon a toda máquina.
Desde esa noche, hasta lo que duró el gobierno de Fidel Herrera, el Semefo estuvo custodiado por fuerzas federales para garantizar la seguridad del personal y de los familiares que llegaban a identificar cadáveres producto de la violencia, pues los Zetas no dejaban de amenazar con atentar contra sus instalaciones por el tema de los cadáveres.
Hubo momentos en ese entonces en donde se dijo que los Zetas si se llevaron varios cadáveres en distintas ocasiones. No había quien los frenara.
OLOR A MUERTE
Cabezas, pedazos de manos, torsos, dedos, piernas, toda clase de extremidades eran abandonadas con mensajes intimidatorios firmados por Los Zetas o Los Matazetas durante ese periodo violento entre 2007 (balacera de Villarín) y agosto del 2009 (levantón y desaparición forzada de Francisco Serrano Aramoni, ex director de la Aduana de Veracruz). En es entonces, el periodista Jorge Morales dio a conocer que durante el gobierno de Herrera Beltrán, se maquillaron notablemente las estadísticas de incidencia delictivas enviadas al Secretariado Ejecutivo, del tal grado que el gran número de ejecuciones quedaron en el olvido.
Fue en ese contexto donde el Semefo de Boca del Río, que está dentro de las instalaciones donde mandaba Trujillo Mariel, se convirtió en la antesala de la muerte, y al poco tiempo, había tanto aroma a carne putrefacta, por las docenas de cadáveres apilados sin reclamar, que los vecinos y colegios aledaños constantemente alzaban la voz contra el instituto para pedir que fuera cambiado de sitio.
EL SACRIFICIO
Antes de que acabara el gobierno de Fidel Herrera Betrán, completamente corroído por la narcoviolencia, Patricia Trujillo puso tierra de por medio con su amado Veracruz.
Dejó atrás familia, tierra, y una carrera en la Universidad Veracruzana, pues tuvo que adelantar su jubilación para tomar un buen trabajo que le ofrecían en la Policía Federal, dónde encontró la oportunidad de consagrarse con todos sus conocimientos, hasta llegar a ser la directora de la Policía Científica.
Trujillo Mariel ingresó a la PF en septiembre del 2019, atrás dejó Veracruz con sus palmeras, la sangre en las calles, las planchas del forense retacadas de cadáveres y extremidades desprendidas de sus cuerpos y las amenazas al Forense.
LA DELINCUENCIA LE ARREBATÓ A SU PADRE
En noviembre del 2010 recibió un golpe fatal, su papá, Gil Trujillo Nieto, considerado uno de los padres de la ciencia forense en Latinoamérica perdió la vida de causas naturales. Días antes había muerto su madre, y el galeno, de 84 años, lo resintió. Por ese tiempo el señor Gil Trujillo Nieto fue visitado por la delincuencia en su casa de Costa Verde, lo agredieron y le quitaron los objetos de valor. Supo la doctora el temor por la cercanía de la delincuencia, aunque fuera común.
COLINAS DE SANTA FE LA TRAJO DE REGRESO
En 2016 fue nombrada directora de la Policía Científica y el destino la puso de nuevo en Veracruz. Las madres del colectivo Solecito de Veracruz lograron entablar conexión con ella, por medio de Roberto Campa, y Trujillo Mariel les mandó a un grupo de expertos en forense para procesar la mega fosa de Colinas de Santa Fe. Si personal también laboró en buena media en la de Arbolillo en colaboración con las autoridades locales.
Lucía de los Ángeles Díaz, vocera de Solecito de Veracruz, se dijo muy satisfecha con el arribo de Trujillo a la Guardia Nacional aunque reconoció el gran vacío que queda porque su trabajo era exitoso e impecable.
ALIDA DE LOS VERACRUZANOS
Algunos observadores de la policía nacional ven en la llegada de Trujillo a ese cargo como la gran oportunidad de que Veracruz cuente con aliada de primer nivel que conoce el terreno y además ha vivido en carne propia los embates de la violencia. Ahora será responsabilidad de las autoridades de Veracruz el aprovecharla.