Escrito por
Carla Martell
“El deporte es una gran escuela donde se forjan valores y virtudes para el crecimiento humano”, afirmó el papa Francisco.
En el marco del Día Internacional del Deporte para el Desarrollo y la Paz que se celebra cada seis de abril, YoInfluyo.com te presenta a cinco deportistas que con sus acciones basadas en el amor y compañerismo lograron inspirar a otros a no darse por vencidos.
El deporte es más que una actividad física, ya que genera lazos sociales y promueve valores como la honestidad, fraternidad, solidaridad, la paz y principalmente la no violencia. En muchos casos el deporte ha motivado a cientos de personas a no darse por vencidos y salir adelante, fue declarado “derecho fundamental” por la Organización de las Naciones unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en 1978.
1.- Yustra Mardini, de origen sirio, compitió en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. Su equipo no estaba abanderado por un país, pues por primera vez el Comité Olímpico autorizó que un grupo de refugiados pudiera participar como equipo en estos juegos. Mardini practicaba natación desde los 13 años, sin embargo, debido a la guerra tuvo que huir de su país con su hermana. Durante el camino en barco de Estambul a Grecia el motor del barco se detuvo, pero Yustra y su hermana, también nadadora, no dudaron en saltar al mar y remolcar el barco durante tres horas a las costas de Grecia.
2.- Muhammad Ali ,este boxeador de origen afroamericano luchó durante toda su carrera por vencer la segregación racial, además destinó fondos para investigar el Parkinson, la enfermedad que sufría. Durante los Juegos Olímpicos de Roma en el año de 1960 tiró su medalla de oro al río Ohio, luego de que en una cafetería de Louisville, Estados Unidos, le negaran el servicio debido a que “no se le servía a negros”, esta acción representó una protesta pública por parte del boxeador ante la situación que se vivía de racismo en EU durante esta época.
3.- Los hermanos Brownlee de origen británico conmovieron al mundo en 2016, durante la Copa del Mundo de Triatlón en Cozumel, México, ya que durante la competencia John Brownlee tuvo un golpe de calor que le impedía continuar corriendo; por suerte, su hermano Alistair Brownlee se encontraba detrás y no dudo en correr rápidamente a auxiliarlo. Alistair tomó a John, lo levantó y juntos finalizaron la carrera, no obtuvieron el primer lugar en la competencia; pero ganaron la admiración de miles de personas ya que la hermandad, solidaridad y amor prevalecieron hasta el último momento.
4.- Gino Bartali, el héroe italiano que salvó a cerca de 800 personas judías durante la Segunda Guerra Mundial. Bartali fue un ciclista reconocido en Italia, ganó durante varias ocasiones el Giro de Italia, competencia más importante del ciclismo en este país. En 1943 Alemania invadió el norte del país, donde se encontraban zonas como la Toscana, en este momento el futuro de los judíos que se encontraban ahí era incierto, sin embargo, el cardenal Dalla Costa hizo un plan en el que Bartali sería la pieza clave: los tubos de su bicicleta servirían para transportar fotos y documentación falsa para judíos. Gino Bartali tomó este riesgo porque sabía que con su reconocimiento como estrella del deporte italiano no sospecharían de él y podría traficar documentos falsos, logrando salvar a 800 judíos.
5.- Rick y Dick Hoyt, los competidores que se vuelven uno cada vez que participan en un maratón. Dick Hoyt es padre de Rick, quien tiene parálisis cerebral, es cuadripléjico y debe usar silla de ruedas, sin embargo, esto no los ha detenido ya que recorren maratones, triatlones y eventos deportivos participando juntos. Dick se dedica a empujar la silla de ruedas de su hijo y han participado de esta manera en más de 1 000 carreras. “Cuando corro siento que mi discapacidad se desvanece”, afirmó Rick en cientos de ocasiones tras finalizar competencias.
“Un lenguaje universal, que abraza a todos los pueblos y contribuye a superar los conflictos y a unir a las personas”, así calificó el papa Francisco al deporte, además de afirmar que es una gran escuela donde se forjan “valores y virtudes” para el crecimiento humano.
Sin duda, el deporte es más que juegos, carreras y premiaciones; el deporte es una oportunidad que cada persona tiene para sobresalir no sólo física sino personalmente, ya que el deporte sin valores es sólo una expresión esquelética de fuerza.