SENTIDO COMÚN
Ante las manifestaciones y reclamos de los padres de familia de niños con cáncer, el gobierno federal y en especial las autoridades de salud han salido a desmentir una y otra vez estas acusaciones de escasez de medicamentos, aduciendo que es una campaña negra en contra del gobierno de la 4T y que no existe tal desabasto.
Aun cuando las autoridades de salud lo niegan rotundamente, la realidad es otra porque nadie sabe dónde se encuentran dichos medicamentos y los padres de familia sufren viendo como el estado de salud de sus hijos se va deteriorando a causa del cáncer.
Sin embargo, quien sí no se midió es el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell quien recientemente en un programa de televisión salió a decir textualmente que dichas protestas son “parte de una campaña más allá del país de los grupos de derecha internacionales que están buscando crear esta ola de simpatía en la ciudadanía mexicana, ya con visión casi golpista”. Pero, no conforme con hacer esta garrafal aseveración agregó que “Este tipo de generación de narrativas de golpe a veces se ha conectado en la historia de Latinoamérica con golpe, golpe, golpe de estado”,
INDIGNACIÓN CONTRA GATELL
Estas afirmaciones hechas por López Gatell despertaron la indignación entre la población, en las redes sociales, en los medios de comunicación, entre los partidos de oposición y por supuesto entre los padres de los niños con cáncer que se han sentido ninguneados y agredidos por el funcionario.
Tal parece que las palabras de López Gatell forman parte efectivamente de una narrativa de ficción, propia de una novela de realismo mágico donde se mezcla la realidad con la fantasía, tratando de engañar al lector de que esta realidad no existe, aun cuando los padres y madres de los pequeños enfermos se han manifestado sin obtener respuesta alguna frente a Palacio Nacional y en las inmediaciones del aeropuerto de la Ciudad de México, sin que el presidente les haga el menor caso.
El presidente, por cierto, ha declarado una y otra vez que no harán falta medicamentos y luego que ya llegaron los medicamentos, pero cuando la gente los busca no los encuentra por ningún lado.
Este es el resultado de la llamada compra consolidada de medicamentos, implementada por el presidente de la República, supuesatmente para evitar la
corrupción que afirma existía en gobiernos pasados. Pero lo cierto es que no hay medicamentos y la corrupción se sigue dando.
De modo que la narrativa usada por Gatell no es ni realista ni mágica, sino falsa y llena de mentiras. Lo cierto es que la última novela de Gatell todavía no se termina de escribir, porque para que sea buena y creíble deberá tener como desenlace la renuncia del propio Hugo López Gatell.
Mientras tanto los padres de familia de los niños con cáncer seguirán esperando el abasto de medicamentos y la renuncia de López Gatell.