Hace unos días trascendió que en el estado de Veracruz alrededor de 100 escuelas particulares cerrarán sus puertas definitivamente por culpa de la pandemia, que ha provocado una crisis económica que ha afectado la capacidad financiera de las instituciones particulares de todos los niveles educativos. Entre estas escuelas que podrían cerrar están algunas de Coatzacoalcos.
El presidente de la corporación de Escuelas particulares del Estado de Veracruz, Carlos Luna Escudero declaró que los ingresos económicos de estas instituciones disminuyeron entre un 35 y 65 por ciento.
A nivel nacional habrá cierres de escuelas debido a la crisis económica provocada por la pandemia, que ha afectado a la economía familiar y ha derivado en una baja de la matricula, toda vez que los padres de familia han visto disminuidos sus ingresos, motivo por el cual han tenido que migrar a sus hijos a escuelas públicas.
Por la falta de liquidez las escuelas privadas han tenido que cubrir los gastos operativos, los sueldos de los maestros y personal administrativo echando mano de recursos que tenían destinados para la modernización de sus instalaciones y en ocasiones han tenido que obtener créditos bancarios con altos costos por los altos intereses.
Algunos padres de familia se han quejado de que les siguen cobrando las colegiaturas aun cuando las clases se impartirán de manera virtual y han atacado en redes sociales a las instituciones privadas, sin tomar en cuenta que algunas escuelas no cuentan con el suficiente capital para seguir operando sin ingresos y que tienen que seguir pagando los sueldos de los maestros y los gastos de operación como son luz, agua, teléfono y otro tipo de servicios.
Esta situación ha orillado a las escuelas privadas a cerrar definitivamente y en algunos casos han tenido que tomar decisiones drásticas para seguir operando, como son reducir la plantilla de personal académico o disminuirles el salario, tanto a los maestros como al personal administrativo.
Para conservar la matrícula y conservar a sus alumnos, las escuelas privadas tendrán que tomar medidas alternas, ofreciendo mejores condiciones, costos más bajos de inscripción y colegiatura, incrementar el número de becas y echar mano de la creatividad para hacer más atractiva su oferta educativa con menos dinero.
Los padres de familia tendrán que estar conscientes de que ni hay suficientes escuelas públicas para los alumnos, ni se puede regalar la educación privada, de manera que tanto instituciones como estudiantes tendrán que hacer un esfuerzo para seguir gozando de una educación de buen nivel.
Pero, no nada más en Veracruz se dará este fenómeno, porque en estados vecinos también habrá una desbandada como Puebla donde cerrarán más de 600 escuelas, en Tamaulipas cerrarían 90 planteles y Tabasco donde más de 2 mil estudiantes abandonarán las escuelas privadas para irse a las públicas.
La pregunta es si habrá suficientes escuelas públicas para recibir a tantos alumnos o tendrá que venir un plan de rescate auspiciado por el gobierno federal, para otorgar becas a los alumnos cuyos padres se hayan quedado sin empleo. Habrá que esperar para ver qué se les ocurre a los genios de la 4 T.