SENTIDO COMÚN
Gabriel García-Márquez
“Es un crimen lo que está haciendo el ayuntamiento de Coatzacoalcos al destruir las terrazas construidas para evitar la invasión de arena en el malecón”, es el reclamo airado de los vecinos del Malecón Costero, donde esta semana los trabajadores de ornatos se dedicaron a arrancar uveros, ixoras, riñoninas y nopales que han servido como barrera natural para contener la arena de la playa durante los fuertes vientos del norte que azotan a este puerto.
Por muchos años estas terrazas sembradas y cultivadas entre la playa y el muro del malecón costero, han impedido que la arena invada el arroyo vehicular del malecón en el tramo entre Las Escolleras, la Plaza de la Bandera y La Pirámide.
La explicación que nos han dado es que van a instalar un tapete de concreto, que servirá para cubrir este tramo de playa, aun cuando todos sabemos que este sistema no servirá para contener las tormentas de arena causadas por las fuertes rachas de viento que se dan en la región y que se han convertido en un grave problema y representan un peligro en las zonas donde no existen estas terrazas naturales.
Por varias administraciones municipales se les ha dado mantenimiento a estas terrazas y se han resembrado para mantener la muralla, que además de dar un realce a la playa ha servido para evitar la invasión de arena. Incluso la iniciativa privada ha apoyado esta jardinera anteriormente y ha aportado recursos para darle mantenimiento colocando muros de contención con lonas y barreras de madera que ayudan a preservar esta terraza natural.
Para mantener estas terrazas se ha tenido que traer tierra negra de otros sitios de la ciudad y en algunos tramos se han tenido que resembrar uveros, que son los que mejor se han dado en este tipo de suelos.
Es una pena que la nueva tónica del gobierno actual, tanto municipal como federal, sea destruir en vez de construir, cuando lo mejor sería dar mantenimiento a lo que ya existe en vez de desaparecerlo y pretender, como en este caso, utilizar técnicas tan caras en tiempos que no se cuenta con recursos para hacer obras que le urgen a la población.
Dicen que el tapete de cemento que se pretende instalar será una buena opción y que le dará realce al malecón, sin embargo, esto no es del todo cierto, porque se ha probado en otros lugares donde se ha utilizado esta técnica, que no sirven para contener la arena, sino por el contrario servirán para que se vaya socavando la
playa, como sucedió en la base del Asta Bandera donde ya existía un tapete de este tipo.
Al Liberal del Sur se han dirigido vecinos de esta zona del malecón a poner su queja y a pedir que el ayuntamiento dé marcha atrás y que suspenda esta obra que atenta contra las terrazas naturales que han sido de gran utilidad por años y que le dan una buena imagen al malecón, además de que afirman muy molestos que ¡Esto es un ecocidio en zona federal!
No hay que olvidar que es mejor conservar lo ya construido que destruirlo para experimentar y tirar el dinero que por cierto no le sobra al municipio