Según cifras del Coneval, al menos 3.8 millones de mexicanos quedaron en pobreza en 2020, sumando en total 55.7 millones en pobreza, lo que representa 43.9 por ciento de la población.
El profesor Cristian Mendoza presentó su libro “La pobreza como problema humano. Relaciones de escasez entre bienes materiales, racionales y espirituales”, que plantea los diferentes tipos de pobreza, cómo es que se crea un círculo de escasez difícil de combatir y cuál es el papel de los y las empresarias en esa tarea.
El libro fue presentado en el Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (IPADE) Business School y en el evento participaron Ana Cristina Dahik Loor, profesora del área de Entorno Político y Social del IPADE, y José Medina Mora, dirigente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
“Hablar de la pobreza nos permite enfocarnos en que no todos los bienes son igualmente necesarios. En muchos lugares, el gran problema es la escasez de bienes materiales. Esa pobreza material es la raíz de pobreza racional, de una concepción deficiente de la vida”, comentó el autor.
Además, compartió que en las sociedades desarrolladas, la pobreza no es material y se podría pensar que en muchos países la mayor parte de la población se ha desarrollado económicamente, al punto que la verdadera pobreza es la falta de capacidad de relacionarse dentro de la familia o con las personas de su entorno.
Durante su intervención, José Medina Mora explicó que, según cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), al menos 3.8 millones de mexicanos quedaron en pobreza en 2020, sumando en total 55.7 millones en pobreza, lo que representa 43.9 por ciento de la población.
“Pensábamos que la solución era el crecimiento económico, pero cuando vemos que hemos tenido crecimiento económico y que la pobreza y desigualdad ha subido, la reflexión es que la visión de la empresa es mucho más trascendente”, comentó Medina Mora y recalcó que como comunidades de personas, el trabajo de las empresas es lograr que tanto colaboradores y dirigentes se conviertan en mejores personas.
Por su parte, Ana Cristina Dahik Loor aseguró que “el tema del combate a la pobreza debe ser columna vertebral del quehacer de la empresa”, pues deben propiciar riqueza tanto para sus colaboradores como para la sociedad.
“La tarea de una empresa no es únicamente crear riqueza económica. Es ciertamente una gran tarea, pero también debe crear una comunidad”, comentó el autor y destacó que los empresarios tienen “el dilema de su empresa ¿por qué existe un empresario? Para dar valor a los demás: valor económico, valor racional de autoestima, de aprecio y un sentido de vida”, concluyó Mendoza.