“El pobre desempeño de ambas empresas se debe a las fallas en supervisión y de gobierno corporativo por lo que es necesario incrementar la vigilancia para no incurrir en prácticas no deseadas”, dijo María Fernanda Ballesteros de la organización México Evalúa.
Pemex y CFE sumaron pérdidas por 703.3 mil millones de pesos en el primer semestre del este año, a pesar de haber recibió apoyo por parte del Gobierno federal que representa 20% del gasto público total (cerca de un billón 230 millones de pesos) a pesar de que la actual administración apuesta por el fortalecimiento de ambas empresas paraestatales.
Así lo dio a conocer la organización México Evalúa al presentar el “Mapa de vigilancia del Estado sobre sus empresas productivas”. El cual se trata de un estudio que identifica, por primera vez, las funciones y responsabilidades de distintas entidades que representan al Estado mexicano en tres de sus faceta: como dueño de Pemex y CFE; como regulador del mercado en que compiten y como garante del interés de la sociedad y las comunidades que se ven afectadas por las actividades que realizan.
Entre las fallas más graves, el estudio destaca: la intervención centralizada en los mercados por parte del Gobierno federal para favorecer a Pemex (representa el 12% del gasto público) y CFE (8% del gasto público); la falta de seguimiento del Congreso al cumplimiento de objetivos de estas empresas; los conflictos de interés a partir de la presencia de miembros del Ejecutivo federal en sus consejo de administración, y la baja prioridad que se le da a la política anticorrupción y de responsabilidad social en estos consejos.
Edna Jaime, directora general de México Evalúa, señaló que una problemática general: “esta administración se ha caracterizado por influir indebidamente para favorecer a Pemex y CFE en distintos rubros del mercado energético, y estas malas prácticas ya tuvieron consecuencias, la inversión extranjera directa al sector energético pasó de 6 mil 820 millones de dólares en 2018 a sólo 1 mil 119 millones de dólares al primer trimestre de 2020, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía”.
México Evalúa propone para mejorar le vigilancia a Pemex y la CFE la creación de una entidad propietaria de las empresa productivas del Estado; el acompañamiento de la política de propiedad de un contrato de gestión entre empresas y el Estado, en el que se establezcan objetivos, metas y parámetros o indicadores para la rendición de cuentas, conforme a lo establecido en el plan de negocios.
Así como una revisión del régimen especial en ambas empresas para que puedan existir mayores controles en compras públicas y control presupuestario a programas sociales que no tienen un objeto comercial y pueden ser utilizados con fines políticos.
“Las mejoras que proponemos en materia de vigilancia al gobierno corporativo de Pemex y CFE buscan construir un Estado más responsable en el control de sus empresas. Esto implica el reconocimiento de las diferencias en las funciones que se ejercen sobre ellas, y una mejora sustancial en materia de rendición de cuentas de cada a los ciudadanos”, resaltó María Fernanda Ballesteros, coordinadora del programa Regulación y Competencia de México Evalúa.