Kirill Dmitriev, director ejecutivo del Fondo Ruso de Inversión Directa, dijo que este es un ejemplo único de cooperación entre científicos de países diferentes en la lucha conjunta contra el coronavirus.
Los fabricantes de la vacuna rusa Sputnik V contra el COVID-19 entregaron a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) la documentación para obtener su autorización y realizar los estudios clínicos en nuestro país.
El Centro Nacional de Investigación en Epidemiología y Microbiología Gamaleya del Ministerio de Salud de la Federación Rusa (Centro Gamaleya) y el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) anunciaron la eficacia del 91.4 por ciento de la Sputnik V, tal como muestra el análisis de los datos del punto de control final de los ensayos clínicos posregistro de fase III.
A través de un comunicado, el Fondo Ruso de Inversión Directa detalló que la evaluación de la eficacia se llevó a cabo entre los voluntarios 21 días después de recibir la primera dosis de la vacuna o placebo, el análisis de control final de los ensayos demostró una tasa de eficacia del 91.4 por ciento.
Hasta el 14 de diciembre, más de 26 mil voluntarios ya han sido vacunados en 29 centros médicos en Rusia como parte de los ensayos clínicos en curso. Actualmente, los ensayos clínicos de fase III están aprobados y en curso en Bielorrusia, los Emiratos Árabes Unidos, Venezuela y otros países.
No se identificaron eventos adversos inesperados durante la investigación. Algunos de los vacunados experimentaron eventos adversos menores de corta duración, como dolor en el punto de inyección y síntomas pseudogripales como fiebre, debilidad, fatiga y dolor de cabeza.
Mikhail Murashko, ministro de Salud de la Federación Rusa, dijo que durante los ensayos clínicos la seguridad de la vacuna se supervisa constantemente.
“Los nuevos datos sobre la eficacia de la vacuna del Centro Gamaleya son extremadamente alentadores. Hoy es obvio para todo el mundo que el fin de la pandemia sólo será posible después de la vacunación masiva de toda la población mundial. En este sentido, garantizar el acceso equitativo a vacunas eficaces y seguras, incluida la vacuna Sputnik V, para la población de todos los países debería ser el objetivo de los organismos reguladores extranjeros y las organizaciones internacionales”, expresó.
AstraZeneca probará componente de la vacuna Sputnik V
Hace unos pocos días, la farmacéutica británica AstraZeneca anunció que comenzará a utilizar los dos componentes de la vacuna rusa Sputnik V a fin de intensificar su efectividad contra el COVID-19.
AstraZeneca admitió que para superar la pandemia del SARS-CoV-2 se necesitará más de una vacuna, y recordó que el gobierno británico anunció hace unos días que comenzará un ensayo clínica en el que se combinarán vacunas de adenovirus con otras de tecnología ARNm.
Antes de fin de 2020, la farmacéutica británica aceptó la propuesta del fondo Ruso de Inversión Directa y el Centro Gamaleya para empezar ensayos clínicos de su vacuna en combinación con el vector adenovirus humanos del tipo Ad26 de la vacuna Sputnik V.
Esta metodología con dos vectores adenovirales diferentes, para una inmunización primaria y una de refuerzo, es un descubrimiento de los científicos del Centro Gamaleya, el cual permite la reacción inmune al primer vector que se forma tras la primera inmunización, y por lo tanto aumenta la eficacia y genera inmunidad a largo plazo.
Kirill Dmitriev, director ejecutivo del Fondo Ruso de Inversión Directa, comentó que este es un ejemplo único de cooperación entre científicos de países diferentes en la lucha conjunta contra el coronavirus, “jugará un papel clave en la victoria final sobre la pandemia a nivel global. La vacuna rusa Sputnik V ya está, hoy en día, salvando vidas en Rusia a través del programa de vacunación a gran escala”.