Por la falta de trabajo miles de familias carecen hoy de sustento para llevar alimento a sus casas, la ayuda es urgente porque las necesidades están rebasadas, por lo que es indispensable mayor colaboración con los más vulnerables
La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) hizo “un llamado de auxilio” para apoyar a las personas debido al COVID-19 han perdido su empleo, su fuente de sustento o han visto disminuido su salario y ahora están desesperados por la gran dificultad que enfrentan para cubrir las necesidades básicas de sus familias.
En videoconferencia de prensa, monseñor Alfonso Gerardo Miranda Guardiola, secretario general de la CEM, apeló a la generosidad de los mexicanos que pueden compartir de sus bienes a través de una aportación económica, en especie o con su trabajo para hacer llegar alimentos y medicinas, de manera segura y transparente, a quienes hoy carecen de recursos para poder comer.
En su mensaje, el obispo auxiliar de Monterrey, dijo que “fruto de la unión y de los esfuerzos de iglesias, empresarios a través de Compromiso Social Mx y diversas instituciones sociales, quienes atendiendo a la actual situación en la que nos encontramos a causa de la pandemia por el COVID-19, y de la mano de todos nuestros aliados, con la máxima responsabilidad y compromiso social, hemos impulsado la creación de Familias sin Hambre, que es una ‘cadena solidaria de alimentos y medicinas’ con el objetivo de ayudar y acompañar a los que menos tienen. Estamos viviendo una situación inédita la cual requiere de la ayuda de todos”.
Por su parte, Fernando Milanés García-Moreno, presidente del consejo directivo de la Unión Social de Empresarios de México (USEM), advirtió que hoy la ayuda no es suficiente, por lo que es apremiante sumar aun más esfuerzos, toda vez que a pesar de que varios empresarios –pequeños, medianos y grandes–, organizaciones de la sociedad civil y voluntarios de buena voluntad se han unido para llevar comida a las mesas de quienes hoy carecen de la misma, no es suficiente para mitigar el hambre de muchas familias.
Milanés dijo que varios organismos empresariales que conforman la asociación Compromiso Social Mx se organizaron para juntar recursos, sin embargo, requerían que se hiciera llegar la ayuda a las personas más necesitadas de manera eficiente, transparente y confiable encontrando eco en Cáritas Mexicana, que como ningún otro tiene la capacidad, experiencia, profesionalismo e infraestructura operativa a lo largo y ancho del país para auxiliar a los menos favorecidos.
Milanés dijo que hasta ahora cuentan con 4 mil 772 solicitudes de apoyo, lo que significa que están 781 despensas por debajo de lo requerido.
En tanto, el presidente de Cáritas Mexicana, Rogelio Narváez, destacó que la infraestructura operativa con que cuentan está compuesta por 74 Cáritas Diocesanas, 74 Vicarías de Pastoral y 850 Cáritas Parroquiales. Asimismo, dio a conocer que los donativos se reciben a través de la cuenta de Cáritas Mexicana I.A.P. en BANCOMER, CUENTA 0123456781, CLABE: 012 180 00123456781 5.
Calculó que del 12 de abril a la fecha se han recibido alrededor 800 mil pesos, que equivalen a cuatro mil despensas para alimentar a familias en diversas partes del territorio nacional.
Indicó que en Cáritas hay 100 mil personas dispuestos a llevar alimentos y medicinas a quienes lo requieren “somos el mejor canal para que las despensas y las medicinas lleguen”, además de que quienes colaboran en esa institución saben hacer rendir los pesitos para los más necesitados, aseguró.
El número del call center habilitado entre Cáritas y Compromiso Social Mx es 01-800-227-4827, y también se puede acceder a través de la plataforma digital www.donadespensas.mx.
Rogelio Narváez, secretario ejecutivo de la Comisión Episcopal para la Paz Social, destacó que quienes soliciten comprobante fiscal lo recibirán lo que también es conveniente para Cáritas, pues así llevan un mejor control de los recursos que reciben, inclusive destacó que él personalmente ha firmado comprobantes por donaciones desde 10 pesos.
Asimismo, comentó que conjuntamente con USEM están articulando una estrategia para generar una bolsa de trabajo y así seguir ayudando a quienes perdieron el suyo.
Destacó que la ayuda para mitigar el hambre de miles de familias terminará hasta que sea necesario, ya que es una prioridad para cubrir las necesidades básicas de muchas familias que hoy, por haber perdido su fuente de ingreso, no lo pueden hacer, situación en la que nadie ha elegido estar.
Entre las instituciones privadas que participan en esta iniciativa se encuentran: AliaRSE, Alianza por la Responsabilidad Social Empresarial conformada por Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Cámara Nacional de Empresas de Consultoría (CNEC), Caux Roud Table México, Comité Nacional de Productividad e Innovación (COMPITE), Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (CONCAMIN), Confederación de las Uniones Sociales de Empresarios de México (USEM), Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), Consejo Coordinador Empresarial (CCE), International Chamber of Commerce México (ICC México), Fundación del Empresariado de México, (Fundemex), Junior Achievement México, Sociedad en Movimiento, Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
Y el apoyo de: Asociación Nacional de Abarroteros Mayoristas (ANAM), Cámara Nacional de la Industria Panificadora (CANAINPA), Catholic.net, Consejo de la Comunicación (CC), Equipo Laicos al Servicio de la Pastoral, Estrategia Web 360°, His Way at Work, Fundación Incluyendo México, Instituto Mexicano de Doctrina Social Cristiana (IMDOSOC), Juntos por México, Movimiento Viva México, Qualfon, Regnum Christi, Seamos Héroes, Siete24 Noticias, Signis, Red de Comunicadores Católicos, Telmex, Unidos Salimos, Yo Influyo.