El Banco de México lanzó una nueva familia de billetes de 200 y 500 pesos y tiene la intención de modificar todas las denominaciones, para dar importancia a los procesos históricos que forman la vida política, cultural y natural de nuestro país.
El Banco de México (Banxico) es una institución autónoma que, por mandato constitucional, se encarga de la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional. En ese sentido y con facultad legal, Banxico decidió destituir de manera gradual los billetes de 500 y 200 pesos, los cuales tenían la imagen de Diego Rivera y Frida Kahlo (500) y Sor Juana Inés de la Cruz (200).
Alejandro Alegre Rabiela, director general de Emisión del Banco de México, explica que la idea de modificar los billetes es hacerlos más seguros y evitar las falsificaciones.
Banxico informó que una de las mejoras del billete de 200 pesos es el gran tamaño del número que indica su valor y que, dentro de sus dígitos tiene pequeñas cifras de 200 que cambian de color, además de estar dotado con un nuevo hilo de seguridad de color azul, pero que, como ocurre con los minúsculos 200, también cambia a una tonalidad gris cuando se gira el billete.
Las modificaciones que incorpora la nueva familia de billetes no sólo están en lo visible, también hay herramientas imperceptibles, como el material implementado en estos nuevos billetes, que es el sustrato de algodón, para hacerlos más resistentes.
Alejandro Alegre asegura que este material, con el que fueron diseñados estos dos billetes que ya están en circulación, les dará más durabilidad, pues según él director, los billetes actuales duran 48 meses antes de empezar a deteriorarse y se espera que los nuevos billetes duren por lo menos 54 meses.
El director asegura que, como ocurre con los anteriores, los nuevos serán de tamaños diferentes según su denominación, para ayudar así a las personas con debilidad visual; “el Banco de México fue de los pioneros en el mundo en ayudar a las personas con discapacidad visual, no solo con el color, sino con el tamaño”.
Otro cambió que la nueva familia de billetes presenta es el arte, el cual ya ha sido duramente cuestionado por la sociedad, sobre todo por retirar a Sor Juana Inés de la Cruz de la imagen del billete de 200.
En ese sentido, Alejandro Alegre asegura que la decisión de modificar las imágenes y las personas que aparecen en los billetes de nueva generación es de la Junta de Gobierno del Banco de México, porque así lo faculta la Ley del organismo; además, explicó que la decisión fue exponer una línea cronológica de la historia de México. Por ello, el billete de 200 hace alusión a la Independencia de México y el de 500 a la Reforma y la restauración de la República con Benito Juárez.
Siguiendo esa lógica, Alegre Rabiela dijo que el siguiente billete en salir será el de mil pesos, que estará en circulación a partir del primer semestre de 2020 y hará alusión al periodo histórico de la Revolución. Adelantó que este billete tendrá en el anverso las imágenes de Carmen Serdán, Hermila Galindo y Francisco I. Madero, y en el reverso, una gráfica alusiva a la ciudad de Calakmul, así como la representación de un Jaguar.
También informó que, siguiendo la lógica señalada, los billetes de 100 tendrán la imagen de Sor Juana, quien representará el periodo histórico de la Colonia. El billete de 50 pesos no incluirá a ningún personaje histórico pues la Junta de Gobierno del Banco de México decidió que, para simbolizar el periodo prehispánico, solo se colocara una imagen alusiva a la formación de México-Tenochtitlan.
Además de estas modificaciones, el Banco de México también puso a disposición de las personas una App interactiva, para poder observar la realidad aumentada generada en los billetes, para que los usuarios conozcan más de los procesos históricos aludidos en sus billetes. El director Alejandro Alegre Rabiela dijo finalmente que esta App no verifica la validez de los billetes, pues no existe aún en el mundo tecnología para conseguirlo, pero sí permite que las personas que la utilicen, conozcan más de su historia y el porqué del arte de cada billete nuevo, el cual será más seguro y casi imposible de falsificar.