Las autoridades de Nicaragua informaron que después de alcanzar un acuerdo con el Vaticano, 19 representantes de la Iglesia católica, entre quienes se encuentran los obispos Rolando José Álvarez Lagos e Isidoro del Carmen Mora Ortega, fueron liberados y enviados a Roma.
En este grupo se encuentran además 15 sacerdotes y dos seminaristas, quienes habían sido encarcelados por el régimen de Daniel Ortega, quien en su último arribo al poder ha arreciado la persecución contra miembros de la Iglesia católica.
El obispo Rolando Álvarez, quien estaba al frente de la diócesis de Matagalpa, había sido condenado a 26 años de prisión además de retirársele su nacional después de ser acusado por el gobierno y condenado por conspiración, propagar noticias falsas y desacato a la autoridad.
En febrero del año pasado, monseñor Álvarez se rehusó a ser liberado y ser enviado a Estados Unidos junto con otros 222 opositores que fueron desterrados de Nicaragua.
Dictadura no ha podido contra Dios
Monseñor Silvio Báez, obispo auxiliar de Nicaragua, dio a conocer la noticia en su homilía del domingo a los feligreses que asistieron a la misa que presidió en Miami.
El prelado que por orden del Sumo Pontífice dejó Nicaragua en 2019 por razones de seguridad, dijo que “hemos orado incesantemente todos los domingos y cada uno por su cuenta hoy tenemos la alegría de poder comunicar la noticia que es pública en todos los medios de que esta noche fueron liberados los dos obispos monseñor Rolando Álvarez que tenía más de 500 días de estar en la cárcel y monseñor Isidoro Mora”, además de 15 sacerdotes y los tres seminaristas, todos libres.
“Lo cuento esto con profunda alegría y lo cuento también para que le demos gracias al Señor. Este es el poder de la oración, del pueblo de Dios.
“La dictadura sandinista criminal de Daniel Ortega no ha podido contra el poder de Dios”, afirmó a lo que los feligreses respondieron con aplausos.
Monseñor Báez invitó a los fieles a agradecer al papa Francisco su interés, cercanía y cariño por Nicaragua, además de reconocer la eficacia de la diplomacia vaticana, “gracias al Señor y gracias a la santa sede hoy celebramos esta gran alegría”, subrayó entre lágrimas de alegría.
En varias ocasiones el papa Francisco externó su preocupación por la Iglesia en Nicaragua y a principios de 2024 en el rezo del Ángelus hizo una petición por la situación de los obispos y sacerdotes “privados de libertad” en el país centroamericano, aseguró su “cercanía en la oración”, invitando al pueblo de Dios a rezar por Nicaragua, por la que expresó la esperanza “de que se busque siempre el camino del diálogo para superar las dificultades”.
Ya el año pasado, en octubre, 12 sacerdotes nicaragüenses habían sido excarcelados. La Santa Sede había aceptado la petición de recibirlos. Acogidos en Roma, los sacerdotes fueron alojados en algunas dependencias de la diócesis.
Los sacerdotes liberados y enviados a Roma son Manuel Salvador García Rodríguez y José Leonardo Urbina Rodríguez, de la Diócesis de Granada; Jaime Iván Montesinos Sauceda, de la Diócesis de Matagalpa; y Fernando Israel Zamora Silva, de la Diócesis de Siuna.
Asimismo, se encuentran Osman José Amador Guillén, Julio Ricardo Norori Jiménez, José Iván Centeno Tercero, Yessner Cipriano Pineda Meneses, Álvaro José Toledo Amador y Pastor Eugenio Rodríguez Benavidez, todos de la Diócesis de Estelí.
Otros de los sacerdotes liberados Cristóbal Reynaldo Gadea Velásquez, de la Diócesis de Jinotega; y Ramón Angulo Reyes, de la Diócesis de Bluefields.